Guía de selección de Sillas Portabebés

La elección de un asiento para bicicleta de niño, ya sea delantero o trasero, es importante a la hora de comprar un asiento para bicicleta de niño. La elección entre estos dos asientos de bicicleta depende principalmente de la edad y el peso de tu hijo.

Cuando tu hijo tiene entre 9 meses y 3 años, el asiento delantero es el más adecuado. Un asiento delantero se puede montar en el manillar de la bicicleta. La mayor ventaja de un asiento infantil delantero es que puedes ver a tu hijo. Además, el portaequipajes queda libre para otros accesorios, como una bolsa de transporte o una cesta de bicicleta. La dirección puede ser más difícil porque el asiento de la bicicleta se inclina hacia delante.

Un asiento de bicicleta montado en la parte trasera es la forma ideal de transportar a tu hijo cuando sea un poco mayor. A partir de los dos años, un asiento trasero es adecuado para tu hijo. Los asientos traseros cuentan con un soporte adicional hasta que el niño tenga aproximadamente 6 años. Los asientos extra fuertes de bicicleta se recomiendan para niños de entre 5 y 10 años porque pueden soportar un peso de hasta 35 kilos. La ventaja de un asiento de bicicleta para niños montado en la parte trasera es que el peso descansa en el portaequipajes y no en el manillar como un asiento montado en la parte delantera. Es importante comprobar el peso que puede soportar el portabebés. Si esto resulta demasiado pesado, el asiento montado en la parte trasera también puede fijarse al tubo del sillín.

A menudo no basta con un asiento de bicicleta delantero o trasero. Para que tu hijo viaje sin preocupaciones en el asiento delantero, se puede añadir un parabrisas para que no entren moscas, piedras y otros residuos. Para aprovechar aún mejor el asiento de la bicicleta, ya sea delantero o trasero, hay accesorios opcionales disponibles. Mima a tu hijo con un rollo para dormir o decora el asiento de tu bicicleta con una guirnalda de flores.